En la mitología griega, Hermes es un dios griego que también es conocido como Mercurio (Mercurius) entre los dioses romanos. Su comportamiento inteligente y táctico aparece en numerosos cuentos, especialmente su gran capacidad de negociación, incluso en las situaciones más difíciles.
Hermes (Mercurio) es hijo de Zeus, el padre de los dioses, y de la pléyade Maia, hija de Atlas. Su lugar de nacimiento se nombra como el monte Kyllene en Arcania o la zona del monte Olimpo, según la fuente. En la mitología griega es uno de los doce dioses del Olimpo. La mitología nos habla de su ingenio e inventiva, de su grandiosa inventiva y de su extraordinaria creatividad. Su gran agilidad y destreza iban unidas a un talante travieso, simpático y alegre.
De la gran riqueza de sus talentos proviene la diversidad de sus dominios. Con sus zapatos y casco alados, el dios Hermes viaja más rápido que la luz. Así, como mensajero de los dioses, anuncia las decisiones de los dioses (de Zeus) a los mortales y se las traduce. Es, por así decirlo, el precursor de los heraldos. Como mensajero de los dioses, es el máximo legislador y tiene una gran autoridad.
Como guía de almas, protege y guía a las almas de los muertos en su camino hacia el inframundo, a la corte de los muertos de Hades. Mercurio es, pues, un mediador entre los mundos, el mundo superior y el inferior, un cruzador de fronteras entre los mundos. Es a la vez un transgresor de la frontera entre los dioses y los mortales y entre el reino humano y el reino de los muertos.
Como dios de la ciencia, está estrechamente relacionado con la química, especialmente con la Alquimia. Así, en la Alquimia, Mercurio es un principio mediador entre los polos opuestos. Hermes es también, entre otras cosas, el dios patrón de los comerciantes y de los marchantes de arte. Es el dios de los viajeros y el dios patrón del tráfico. Entre sus otros dominios destaca la magia, por lo que Hermes no sólo era el dios de la magia, sino también el de los malabaristas y los ladrones. También es un maestro del engaño y la confusión.
Otros símbolos de Hermes son el pergamino y su bastón de pastor. Así, es también el dios de la ciencia, la mediación de la palabra, la oratoria y un dios pastor. Hermes es el patrón de la Academia Hermética. La Academia Hermética conserva las instrucciones herméticas que ayudan a las personas a encontrar el sentido, la autorrealización y el autoconocimiento.